Visiblemente satisfecho por el entusiasmo suscitado en Estrasburgo durante su visita al Parlamento Europeo y al Consejo de Europa, durante el vuelo de regreso a Roma el Papa respondió a laspreguntas de los periodistas.
¡Querido, esto es reduccionismo! Así me siento en una colección de insectos, ahí… ¡este es un insecto social-demócrata! No sé si Papa social-demócrata o no… no, yo no oso calificarme en una u otra parte, yo oso decir que esto viene del Evangelio, este es el mensaje del Evangelio que toma la doctrina social de la Iglesia. Yo, en esto y en otras cosas sociales o políticas que he dicho, nunca me he alejado de la doctrina social de la Iglesia, que viene del Evangelio y de la tradición cristiana… Esto que dije sobre la identidad de los pueblos es un valor evangélico; en este sentido… ¡Pero me hiciste reír, gracias!
No está programado todavía, pero hay quei r a París. Claro. Y luego hay una propuesta de ir a Lourdes… Yo pedí una ciudad a la que no hubiera ido ningún Papa, para saludar a los ciudadanos. Pero no está preparado. En relación con Estrasburgo, la cosa se pensó, pero ir a la catedral era como hacer una visita a Francia, y este fue el problema…
Sí, cada vez que le pido una cosa, San José me la ha dado. Lo de la transversalidad es importante. Lo he visto en mis diálogos con los jóvenes políticos, aquí y en el Vaticano, de diferentes partidos y naciones, que ellos hablan con una música diferente y que tiende a la transversalidad. Es un valor, ellos no tienen miedo de salir de la propia pertenencia, sin negarla, sino de salir para dialogar, y son valientes; por eso creo que debemos imitar esto, y también el diálogo intergeneracional… Pero este salir para encontrarse con las personas y dialogar… Es lo que necesita Europa hoy.
Yo la recibí y leí eso; llamé a la persona y le dije: “Tú mañana vas a ver al obispo”. Y le escribí al obispo para que comenzara el trabajo, hacer la investigación y seguir adelante. ¿Cómo la recibí? Con gran dolor, gravísimo dolor. Pero la verdad es la verdad, y no debemos esconderla.
Yo nunca doy por perdida ninguna cosa, nunca. Tal vez no se puede tener un diálogo… Pero nunca cierro una puerta. Es difícil, podrías decir casi imposible, pero la puerta siempre está abierta, ¿no? Usted usó dos veces la palabra amenaza. Es cierto, el terrorismo es unade las tantas que amenazan. Pero la esclavitud es una realidad inserta en el tejido social de hoy. EL trabajo esclavo, la trata de personas, el comercio de niños… Es un drama, ¡no cerremos los ojos ante esto! La esclavitud, hoy, es una realidad, La explotación de personas… En cambio, la amenaza de estos terroristas… pero también hay otra amenaza, el terrorismo de Estado, cuando las cosas suben, suben, suben, y cada Estado, por su cuenta, se siente con el derecho de masacrar a los terroristas, y con los terroristas caen muchos que son inocentes… Y esto es una anarquía de alto nivel, que es muy peligrosa. Con el terrorismo se debe luchar, pero repito lo que he dicho: cuando se debe detener al agresor injusto, se debe contar con el consenso internacional. Ningún país tiene el derecho, por cuenta, de detener a un agresor injusto.
No lo sé, de veras… creo que viajo con last res cosas… ¿pero, de dónde te vino esta pregunta? Me obliga a pensar un poco… La memoria es la de arzobispo de Buenos Aires, Pero esto ya no existe… Ahora soy obispo de Roma y sucesor de Pedro. Creo que viajo con esa memoria, pero con esta verdad. Para mí, Europa en este momento me preocupa, para ayudar a que salga adelante, y esto como obispo de Roma y como sucesor de Pedro… Soy romano.
Gracias por su trabajo; esta fue una jornada fuerte. Y no se olviden de rezar por mí.