Fr. EUGENIO ALLIATA, ofm
Studium Biblicum Franciscanum Jerusalén
La Basílica del Santo Sepulcro es una construcción antigua, que se remonta en parte a la época de las Cruzadas, en el siglo XII, y en parte a tiempos aún más antiguos.
La historia de la Basílica ha estado bien documentada a lo largo de los siglos, a través de testimonios y narrativas que nos ayudan a examinarla y comprenderla. En este episodio seguiremos los textos bíblicos, las huellas que dejaron los primeros peregrinos, recorriendo los hechos gracias al estudio de los restos arqueológicos que son testimonio del paso de los siglos.
Fr. AMEDEO RICCO, ofm
Studium Biblicum Franciscanum
Y esto es muy importante para nosotros porque también ayuda a los arqueólogos a comprender, leer los hallazgos arqueológicos y más. Por tanto, los hallazgos arqueológicos nos ayudan a comprender mejor las historias de los peregrinos. Esta es la relación de continua iluminación mutua entre las fuentes antiguas y la documentación arqueológica.
Destruida y reconstruida varias veces, en 1927 la basílica fue golpeada por un terremoto muy fuerte, que provocó la destrucción de Jerusalén.
En 1960 se iniciaron las obras de restauración de la Basílica del Santo Sepulcro. Un trabajo documentado paso a paso durante 20 años. Las tres comunidades presentes en el Santo Sepulcro eligieron a Fr. Virgilio Corbo como arqueólogo para los trabajos en las zonas comunes. Una tarea que le ocupó durante 17 años, desde la mañana hasta la noche.
Fueron 20 años de arduo trabajo arqueológico y de restauración, que ofrecieron resultados importantes. En la presentación de la serie sobre el Santo Sepulcro, el padre Virgilio Corbo escribió:
“Hemos terminado nuestro trabajo de investigación y lo presentamos a los estudiosos. Sólo queremos esperar que se lea con amor hacia Aquel que es la figura triunfante de este monumento".
Fr. ROSARIO PIERRI, ofm
Decano Studium Biblicum Franciscanum
El trabajo del estudio franciscano forma parte de una historia mucho más antigua. Los frailes, desde que se establecieron en Tierra Santa, siempre han tratado de adquirir las tradiciones y también las propiedades de los lugares de Tierra Santa y el estudio de los lugares de Tierra Santa no comienza sólo con el Studium Biblicum Franciscanum. Tenemos las obras, por poner dos ejemplos verdaderamente prestigiosos, del padre Bernardino Amico y Francesco Quaresima y nos remontamos al siglo XVI.
Fr. ROSARIO PIERRI, ofm
Decano Studium Biblicum Franciscanum
El estudio bíblico franciscano ha contribuído notablemente al conocimiento y estudio de los Santos Lugares, especialmente desde un punto de vista científico. Con el estudio de las fuentes y las excavaciones realizadas en los yacimientos, sin duda ha dado a conocer al mundo muchos lugares.
Gracias al acuerdo entre los líderes de las tres comunidades responsables de la basílica (franciscanos, greco-ortodoxos y armenios), en la primavera de 2016 comenzaron los trabajos de restauración del edículo del Santo Sepulcro.
En el grupo de intervención creado por la Universidad de Atenas, bajo la dirección de la profesora Antonia Moropoulou, ha participado nada menos que medio centenar de profesionales, entre profesores y técnicos de diferentes especialidades.
Un momento histórico para el mundo cristiano, pero también para el mundo científico, en una obra en la que fe y ciencia se encuentran.
En 2019, se firmó un nuevo acuerdo entre los líderes de las tres comunidades para el inicio de una nueva fase de obras subterráneas para la restauración del pavimento de la Basílica. Dos institutos italianos, el Centro de Conservación y Restauración del Patrimonio Cultural La Venaria Reale de Turín, en colaboración con el Departamento de Ciencias Antiguas de la Universidad La Sapienza de Roma, estudió el subsuelo de la basílica para un proyecto ejecutivo de las intervenciones de restauración.
Gracias al mapeo de todas las piedras del pavimento, que fueron retiradas para permitir las obras de renovación, fue posible reposicionar las losas exactamente en el mismo lugar por el que han caminado millones de peregrinos a lo largo de los siglos.
Para la Dra. Francesca Stasolla, el trabajo de Fr. Virgílio Corbo ha sido de gran ayuda en el desarrollo de esta fase del trabajo.
FRANCESCA ROMANA STASOLLA
Arqueóloga de la Universidad La Sapienza de Roma
La aportación del padre Virgilio Corbo ha sido decisiva para nuestras excavaciones. El padre Corbo pudo seguir el trabajo de la administración jordana durante una serie de obras de utilidad pública que logró transformar en verdaderas investigaciones arqueológicas. Es una gran responsabilidad realizar una excavación arqueológica. Siempre es una gran responsabilidad, porque es la responsabilidad de restaurar, interpretar, restaurar um fragmento de la historia.
Un trabajo de gran responsabilidad realizado en sinergia entre múltiples instituciones.
FRANCESCA ROMANA STASOLLA
Arqueóloga de la Universidad La Sapienza de Roma
Y en este lugar diría que la responsabilidad es quizás mayor, porque significa tratar de comprender, interpretar y restaurar una versión de la historia que es también historia sagrada. Y en esto me siento muy afortunada, porque hay un equipo extraordinario no solo de arqueólogos sino también de estudiosos de otras disciplinas que colaboran en esto y por eso desde este punto de vista tengo confianza en que todos juntos y junto a todos aquellos que apoyan este proyecto, espero que podamos completar la tarea.
Fr. ROSARIO PIERRI, ofm
Decano Studium Biblicum Franciscanum
Quiero recordar también las excelentes relaciones que se han establecido entre el equipo que está realizando la obra y el estudio franciscano que colabora activamente en estas obras, concretamente el P. Alliata y el P. Amedeo Ricco.
Fr. AMEDEO RICCO, ofm
Studium Biblicum Franciscanum
Es una oportunidad extraordinaria para cualquier estudioso formar parte de este equipo de arqueólogos, pero no sólo arqueólogos, porque detrás hay historiadores, filólogos, un gran equipo al servicio de la comprensión de las fuentes antiguas y de los hallazgos arqueológicos. Es una gran oportunidad y todos somos conscientes de que estamos realizando una obra que no es nuestra, sino que es para toda la humanidad y para toda la historia de la humanidad, porque este lugar ha sido importante porque además de para la fe de los cristianos también ha sido decisivo para la historia de la humanidad.
A principios de este año se abrió una nueva fase de las obras en el Santo Sepulcro, tras la conclusión de las realizadas en torno a la Rotonda del Edículo. Y en palabras del Dr. Stasolla:
«Será muy interesante en los próximos años ver los estudios que se publicarán, estudios que resumirán el trabajo de estos arqueólogos y restauradores que han trabajado aquí».
Me interesa mucho saber sobre estás maravillas.