Hijo un oficial del rey Dagoberto. Fue llamado al sacerdocio desde muy joven aunque vivió en la corte mucho tiempo. Fue nombrado obispo al morir Lamberto, arzobispo de Sens, al sureste de París, como 28º prelado de la diócesis, desempeño sus labores como obispo durante años dos años y medio, tras estos años renuncio a su cargo para evangelizar a los frisios, pueblo que se encontraba en la parte norte de la Holanda actual.
Para prepararse la evangelización de estos Vulframno paso un tiempo de retiro en la abadía de Fontenelle donde conoció más monjes que estaban interesados en predicar a los frisios. San Vulframno y estos partieron hacia Frisia en barco, cuando llegaron empezaron a predicar y tuvieron un gran éxito, convirtiendo a grandes números de personas, el converso más conocido de estos fue uno de los hijos del rey Radbod. Uno de las practicas que intentaron revocar era la de los sacrificios humanos pero el rey lo declaro como una costumbre del país y que por ello los monjes no podían intervenir, estas practicas estaban muy extendidas. Una de la historias en relación con este tema ocurrió cuando se iba a sacrificar a un niño llamado Ovon el santo se opuso a este sacrificio, el rey le dijo que el tenia la libertad de salvarlo si su Dios le ayudaba. Este comenzó a orar incesantemente y tras estar colgado el niño durante dos horas se rompió la cuerda y el niño seguía vivo, san Vulframno enviaría a Ovon al monasterio de Fontenelle donde Ovon se haría monje y más tarde recopilaría la conversión de los frisios.
Ovon no fue la única persona que fue salvada por San Vulframno, salvo a dos niños que estaban sumergidos en el mar victimas de un sacrificio a la diosa del mar. Cuenta la leyenda que el rey Radbod estaba tan impresionado que acepto en bautizarse cosa que estuvo a punto de ocurrir pero se retracto en el momento de bautizarse. tras varios años de evangelización volvió a Fontenelle, donde falleció. Sus reliquias se veneran en Abbeville.