"No lleves una doble vida, ni andes entre tinieblas" Papa
Durante su homilía de este viernes en Casa Santa Marta, el Papa dijo a los cristianos que no deben llevar una doble vida ni andar entre tinieblas. Allí, dijo Francisco, no está la verdad de Dios.
Papa en Santa Marta: No lleves una doble vida
Durante su homilía de este viernes en Casa Santa Marta, el Papa dijo a los cristianos que no deben llevar una doble vida ni andar entre tinieblas. Allí, dijo Francisco, no está la verdad de Dios.
PAPA FRANCISCO
"Si dices que estás en comunión con el Señor, entonces camina en la luz. ¡Pero, una doble vida, no!¡Eso no! Esa mentira que estamos tan acostumbrados a ver, e incluso a caer en ella ¿no? Decir una cosa y hacer otra ¿no? Siempre la tentación… Nosotros sabemos de dónde viene la mentira: en la Biblia, Jesús llama al diablo ‘el padre de la mentira’, el mentiroso”.
Francisco también recordó que si uno cae en esa tentación siempre podrá contar con el perdón y la dulzura de Dios.
El Papa pidió no acusar a nadie de pecador creyéndose justo porque todas las personas pecan y Dios espera y perdona.
EXTRACTOS DE LA HOMILÍA DEL PAPA
(Fuente: Radio Vaticana)
«Si dices que estás en comunión con el Señor, entonces camina en la luz. ¡Pero, una doble vida no!¡Eso no! Esa mentira que estamos tan acostumbrados a ver, e incluso a caer en ella ¿no? Decir una cosa y hacer otra ¿no? Siempre la tentación… Nosotros sabemos de dónde viene la mentira: en la Biblia, Jesús llama al diablo ‘el padre de la mentira’, el mentiroso. Y por ello, con tanta dulzura, con tanta mansedumbre, este abuelo le dice a la Iglesia ‘adolescente’: ‘¡No seas mentirosa!’ Tú estás en comunión con Dios, camina en la luz. Haz obras de luz, no decir una cosa y hacer otra, no tener una doble vida y todo eso».
«Tenemos un Paráclito, una palabra, un abogado, un defensor ante el Padre: es Jesucristo, el Justo. Él nos justifica, Él nos da la gracia. A uno le dan ganas de decirle a este abuelo que nos aconseja así: ‘Pero ¿no es tan feo tener pecados?’ ¡Claro, el pecado es feo! Pero si has pecado, ¡mira que te esperan para perdonarte! ¡Siempre! Porque Él – el Señor – es más grande que nuestros pecados».
«Caminemos en la luz, porque Dios es Luz. No vayamos con un pie en la luz y el otro en las tinieblas. No hay que ser mentirosos. Y, otra cosa: todos hemos pecado. Nadie puede decir: ‘Éste es un pecador, ésta es una pecadora. Yo, gracias a Dios, soy justo’. No, sólo uno es Justo, Aquel que ha pagado por nosotros. Y si alguien peca, Él nos espera, nos perdona, porque es misericordioso y sabe muy bien de qué somos plasmados y recuerda que somos polvo. Que la alegría que nos da esta lectura nos lleve adelante en la sencillez y en la transparencia de la vida cristiana, sobre todo cuando nos dirigimos al Señor, con la verdad».