El Papa Francisco explicó en la Misa en Casa Santa Marta que los cristianos pueden caer en la tentación del 'bienestar espiritual', porque hay muchos medios en la Iglesia para alcanzar la salvación. También alabó la actitud de los que buscan imitar de verdad a Jesús, incluso en los momentos difíciles.
Ciudad del Vaticano, 27 de septiembre de 2013. (Romereports.com)
“Y esta es la tentación del bienestar espiritual. Tenemos todo: tenemos la Iglesia, tenemos a Jesucristo, los Sacramentos, la Virgen María: todo. Un buen trabajo por el Reino de Dios. Somos buenos, todos. ¡Porque, al menos debemos pensar esto, si pensamos lo contrario es pecado! Pero no basta con el bienestar espiritual hasta cierto punto. Como aquel joven que era rico: quería seguir a Jesús, pero hasta cierto punto. Falta una última unción del cristiano, para ser cristiano de verdad: la unción de la Cruz, la unción de la humillación. Él se humilló a sí mismo hasta la muerte, y muerte de Cruz. Esta es la 'piedra de toque', la prueba de nuestra realidad cristiana: ¿Soy un cristiano de la cultura del bienestar? ¿Soy un cristiano que acompaña a Jesús hasta la Cruz? La señal es la capacidad de soportar las humillaciones”.
El Papa dijo que soportar las humillaciones, la Cruz de cada día, con alegría y paciencia es la prueba de que se es verdadero cristiano.
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(Fuente: Radio Vaticana)
“Fue el Espíritu Santo el que tocó el corazón de Pedro para decir quién es Jesús. 'Eres el Cristo, el Hijo de Dios vivo... es un misterio, ¿eh?. ¿Quién puede explicar eso?... Pero él lo ha dicho. Y si cada uno de nosotros, en la oración, mirando al Tabernáculo, dice al Señor: 'Tu eres el Cristo, el Hijo de Dios vivo'... primero no podemos decirlo por nosotros mismos, debe ser el Espíritu Santo el que lo diga; y, segundo, preparaos, porque El te responderá: 'Es verdad'”.
“Y esta es la tentación del bienestar espiritual. Tenemos todo: tenemos la Iglesia, tenemos a Jesucristo, los Sacramentos, la Virgen María: todo. Un buen trabajo por el Reino de Dios. Somos buenos, todos. ¡Porque, al menos debemos pensar esto, si pensamos lo contrario es pecado! Pero no basta con el bienestar espiritual hasta cierto punto. Como aquel joven que era rico: quería seguir a Jesús, pero hasta cierto punto. Falta una última unción del cristiano, para ser cristiano de verdad: la unción de la Cruz, la unción de la humillación. Él se humilló a sí mismo hasta la muerte, y muerte de Cruz. Esta es la 'piedra de toque', la prueba de nuestra realidad cristiana: ¿Soy un cristiano de lacultura del bienestar? ¿Soy un cristiano que acompaña a Jesús hasta la Cruz? La señal es la capacidad de soportar las humillaciones”.
“La prueba de que un cristiano es un cristiano de verdad es su capacidad de soportar con alegría y con paciencia las humillaciones; y esto es algo que no gusta... Pero son muchos los cristianos que mirando al Señor, piden humillaciones para parecerse más a Él. Esta es la elección: o cristianos del bienestar – que irás al Cielo, ¿eh?, seguro que te salvarás, ¿eh?- o cristiano cercano a Jesús, por el camino de Jesús”.