El Papa dice llevar esta fecha en su corazón y destacó el ejemplo y la firmeza en la fe de los 21 mártires ortodoxos coptos. Lo ha expresado así en este vídeomensaje para la “Jornada de los mártires contemporáneos”.
FRANCISCO
“Aquel día fueron bautizados también con la sangre. Son nuestros santos, los santos de todos los cristianos, los santos de todas las denominaciones y tradiciones cristianas. Son los que han blanqueado sus vidas en la sangre del Cordero, son aquellos... del pueblo de Dios, el pueblo fiel de Dios”.
Condenó la tragedia perpetrada por extremistas religiosos y destacó que estos mártires “fueron a trabajar al extranjero para mantener a sus familias”.
FRANCISCO
“No, no sólo buscaban tener pan en casa, sino llevarlo a casa con la dignidad del trabajo. Y esos hombres dieron testimonio de Jesucristo. Degollados por la brutalidad del Isis, murieron diciendo: "¡Señor Jesús!", confesando el nombre de Jesús”.
Agradeció a los obispos y sacerdotes de la Iglesia copta que les enseñaron a crecer en la fe.
FRANCISCO
“Y doy gracias a las madres de esta gente, de estos veintiún hombres que los "amamantaron" en la fe: son las madres del pueblo santo de Dios que transmiten la fe "en dialecto", un dialecto que va más allá de las lenguas, el dialecto de la pertenencia”.
Durante la “Jornada de los mártires contemporáneos”, el Papa dió las gracias a Tawadros, Papa de la Iglesia ortodoxa copta y al arzobispo de Canterbury, Justin Welby, promotor de este evento.
El encuentro busca recordar el testimonio de los cristianos perseguidos en nuestros tiempos, para que su memoria perdure como ejemplo para el futuro.
Daniel Díaz Vizzi