El Papa deja tarea: “busquen la fecha de su bautismo”

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Durante el rezo del Angelus Francisco instó a una multitud a conocer la fecha en que recibieron el primer sacramento, para festejar su nacimiento como hijos de Dios.

 

Antes, por la mañana, Francisco bautizó a 26 bebés en la Capilla Sixtina.

Durante el rezo del Angelus Francisco instó a una multitud a conocer la fecha en que recibieron el primer sacramento, para festejar su nacimiento como hijos de Dios.

“Por eso, ahí va la tarea para la casa: esta semana ir a buscar la fecha de mi bautismo”. Cual maestro, el Papa dialogó hoy con una multitud. Preguntó a los fieles congregados en la Plaza de San Pedro si saben la fecha en que recibieron el primer sacramento. Les aseguró que ese día “hay que festejar”, porque el bautismo se recibe una sola vez pero se debe compartir siempre con quienes “caminan en las tinieblas”

Al mediodía de este domingo Francisco se asomó a la ventana de su estudio personal, en el Palacio Apostólico del Vaticano. Antes de bendecir a la muchedumbre con la oración mariana del Angelus recordó que este día la Iglesia celebra la fiesta del bautismo de Jesús.

Saliéndose del discurso preparado exclamó: “Todos nosotros fuimos bautizados. Agradezcamos este regalo y les hago una pregunta: ¿quién de ustedes conoce la fecha de su bautismo? Seguramente no todos. Por eso los invito a ir a buscar la fecha preguntando por ejemplo a vuestros padres, padrinos, abuelos o yendo a la parroquia. Es muy importante conocerla, porque es una fecha para festejar, es la fecha de nuestro renacimiento como hijos de Dios. Por eso tarea en casa para esta semana ir a buscar la fecha de mi bautismo”.  

Aseguró que festejar el bautismo significa reafirmar la propia adhesión a Jesús, con el empeño de vivir como cristianos, miembros de la Iglesia y de una humanidad nueva, en la cual todos son hermanos.  

Pero advirtió que la “realidad estupenda” de ser hijos de implica la responsabilidad de seguir a Jesús, “el siervo obediente”, y reproducir en uno mismo sus lineamientos: mansedumbre, humildad, ternura. Reconoció que eso no es fácil, especialmente porque en el entorno existe intolerancia, soberbia y dureza. “¡Pero con la fuerza que viene del espíritu santo es posible!”, constató. 

Precisó que recibir por primera vez el espíritu santo, el día del bautismo, abre el corazón a la verdad, empujar por el camino “fatigoso pero gozoso de la caridad y de la solidaridad hacia los hermanos”, dona la ternura del perdón divino y llena con la “fuerza invencible” de la misericordia del padre. 

“El bautismo se recibe una sola vez, pero debe ser atestiguado todos los días, porque es vida nueva a compartir y luz para comunicar, especialmente a cuantos viven en condiciones no dignas del hombre y caminan en senderos tenebrosos”, apuntó. 

Antes, la mañana del domingo, el líder católico bautizó a 26 bebés durante una misa que celebró en la Capilla Sixtina. Acompañados por sus padres, los 13 niños y las 13 niñas fueron uno a uno rociados con el agua bendita en una pila bautismal. El sermón de Bergoglio fue breve y durante el mismo recordó que, 40 días después de su nacimiento, Jesús fue llevado al templo por sus padres para ser presentado. 

De la misma manera, continuó, los padres llevan a sus hijos a recibir el bautismo. Dicen: “yo quiero la fe para mi hijo”. Explicó que esa manera la fe es transmitida, de una generación a otra, como una cadena a lo largo de los tiempos. Y por eso, siguió, pasados los años esos mismos niños y niñas ocuparán el lugar de sus padres con sus propios hijos.  

“La Iglesia cuando les entrega la vela encendida les pide custodiar la fe de estos niños; no se olviden que la más grande herencia que ustedes pueden dar a vuestros niños es la fe. Buscar que no se pierda, hacerla crecer y dejarla como herencia. Les deseo esto hoy a ustedes, que es un día de alegría para ustedes. Les deseo que sean capaces de hacer crecer en estos niños la fe. Que la más grande herencia que ellos reciban de ustedes sea la fe”, apuntó. 

Y al final concluyó con un aviso: “cuando un niño llora porque tiene fe a las mamás les digo: Si tu niño tiene hambre dale de comer. Aquí, con toda libertad”.

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