Papa Francisco almorzó sorpresivamente con los empleados de la Santa Sede en el comedor del Vaticano. Jorge Mario Bergoglio «se presentó aquí, cogió su bandeja, los cubiertos, y se puso a hacer la fila para que le sirviéramos», contó a la Radio Vaticana el chef del comedor, Franco Paini, que se encuentra en el “área industrial” del Estado Pontificio, en la que trabajan los obreros de la carpintería y de la Central eléctrica vaticana, los herreros y los empleados del Laboratorio hidráulico.
“L’Osservatore Romano” dio la noticia en su perfil de Twiter, en donde publicó además algunas fotos del Pontífice almorzando con los obreros vaticanos.
El Papa argentino «comió la pasta en blanco y merluza», contó Panini. Jorge Mario Bergoglio se presentó «como el más humilde de los obreros», «nos presentamos, nos preguntó cómo estábamos, qué trabajo hacíamos, nos felicitó…». Al final del almuerzo, el Papa «nos dio la bendición, se tomó una foto con nosotros y se fue». La visita duró alredetor de una hora. «Perdóneme –se disculpó el chef del comedor a los micrófonos de la emisora vaticana– es qu esigo emocionado, ¿eh?». La presencia de Bergoglio «¡fue una sorpresa! ¡Justo como un rayo en el cielo sereno! ¡Quíen se la iba a esperar! El Papa que viene a comer con nosotros… Eh, nos encontró desprevenidos, pero fue una de las más grandes satisfacciones que te puedan pasar…».
Fuente: Vatican Insider