Augusto recibe a sus invitados. Dos mil años después de su muerte, el primer emperador vuelve a Roma, la capital del imperio que gobernó durante 40 años.
El emperador Augusto "regresa" a Roma
Augusto recibe a sus invitados. Dos mil años después de su muerte, el primer emperador vuelve a Roma, la capital del imperio que gobernó durante 40 años.
Bajo su mandato, el más largo de la historia romana, el Imperio extendió sus dominios por casi toda Europa. Ahora esta muestra conmemora el bimilenario de su muerte y recuerda su figura y sus conquistas a través de piezas únicas.
CLAUDIO PARISI PRESICCE
Co-director de "Augusto”
"Lo que más llama la atención es haber tenido la posibilidad de unir tantas obras maestras. Son muchas las obras que se exponen aquí por primera vez y que han salido de sus lugares de origen por primera vez tanto si hablamos del ámbito italiano como de los museos extranjeros”.
Esta es una de las obras maestras, Augusto en bronce emergido del mar Egeo, que por primera vez visita Italia. Pero además Londres, París, Viena o Nueva York han prestado sus fondos para componer esta exposición. Del Museo Británico llega este raro camafeo, el conocido como "Blacas Cameo” tallado en ónix, una piedra semipreciosa. También este busto del emperador procede de Londres. Augusto amaba su imagen y conocía bien el poder que tenía.
CLAUDIO PARISI PRESICCE
Co-director de "Augusto”
"Esta muestra recoge el arte figurativo de la época augusta recopilando las obras principales que ilustran cómo Augusto usaba el arte para la propia propaganda y, por tanto, como había transformado la Roma republicana en una Roma imperial a través del poder de la imagen”.
Por eso su retrato y sus símbolos se prodigaban en monedas y camafeos, como estos dos llegados de Nueva York y de París. Pero sin duda, la imagen que tenemos en la retina de Octavio Augusto es ésta: El Augusto de Prima Porta de los Museos Vaticanos, que también abandona su museo por primera vez. Aquí arenga a las tropas acompañado por el Doríforo del Museo Arqueológico de Nápoles, el perfecto modelo clásico.
E incluso, su enemiga, Cleopatra, también está en la exposición como parte de la historia personal y bélica del emperador romano.
Para todos los interesados, el imperio de Augusto vuelve a instalarse en Roma sólo hasta el próximo 9 febrero.