«Dios no comercia. Es una mamá que canta canciones de cuna» Francisco

825c939ed3e8f5731bfe6f5becd14d5e.jpg

Además explicó cómo es el amor de Dios. Dijo que es gratuito, como el que una madre siente por su hijo.

 

En su homilía en Casa Santa Marta, el Papa Francisco explicó que la gracia de Dios no se puede contabilizar ni medir, no es una mercancía.

Además explicó cómo es el amor de Dios. Dijo que es gratuito, como el que una madre siente por su hijo.

 

FRANCISCO

"Y así, esta verdad tan bella de la cercanía de Dios se desliza en una contabilidad espiritual: ‘No, yo hago esto porque esto me dará 300 días de gracia… Yo hago aquello porque me dará esto, y así acumulo gracia’. Pero, ¿qué cosa es la gracia? ¿Una mercancía? Y así, parece que sí. Parece que sí. Y en la historia esta cercanía de Dios a su pueblo ha sido traicionada por esta actitud nuestra, egoísta, de querer controlar la gracia, cosificarla”.

RESUMEN DE LA HOMILIA

(Fuente: Radio Vaticana)

"Es tanta la cercanía que Dios se presenta aquí como una mamá, como una mamá que dialoga con su niño: una mamá, cuando canta la canción de cuna y toma la voz del niño y se hace pequeña como el hijito y habla con el tono del niño hasta el punto de parecer ridículo, si uno no entiende qué cosa grande hay ahí: ‘No temas gusanito de Jacob. Pero, cuántas veces una mamá dice estas cosas al niño mientras lo acaricia, ¡eh! He aquí, te convertiré en una trilladora, nueva… te haré grande… Y lo acaricia, y lo acerca a ella. Y Dios hace así. Es la ternura de Dios. Está tan cerca de nosotros que se expresa con esta ternura: la ternura de una mamá”.

"Y así, esta verdad tan bella de la cercanía de Dios se desliza en una contabilidad espiritual: ‘No, yo hago esto porque esto me dará 300 días de gracia… Yo hago aquello porque me dará esto, y así acumulo gracia’. Pero, ¿qué cosa es la gracia? ¿Una mercancía? Y así, parece que sí. Parece que sí. Y en la historia esta cercanía de Dios a su pueblo ha sido traicionada por esta actitud nuestra, egoísta, de querer controlar la gracia, cosificarla”.

"Y San Pablo reacciona con fuerza contra esta espiritualidad de la ley. ‘Yo soy justo si hago esto, esto, esto. Si no hago esto no soy justo’. Pero tú eres justo porque Dios se te ha acercado, porque Dios te acaricia, porque Dios te dice estas cosas bellas con ternura: ésta es nuestra justicia, esta cercanía de Dios, esta ternura, este amor. Incluso con el riesgo de parecernos ridículo, nuestro Dios es tan bueno. Si nosotros tuviéramos el valor de abrir nuestro corazón a esta ternura de Dios, ¡cuánta libertad espiritual tendríamos! ¡Cuánta! Hoy, si tienen un poco de tiempo, en su casa, tomen la Biblia: Isaías, capítulo 41, desde el versículo 13 hasta el 20, siete versículos. Y léanlos. Esta ternura de Dios, este Dios que nos canta a cada uno de nosotros la canción de cuna, como una mamá”.

http://www.romereports.com/homepage

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

SUSCRIPCIÓN

Suscríbete al Boletín gratuito de Primeros Cristianos
Subscription
magnifiercrosschevron-down