Fechada en el siglo VI a.C, es el hallazgo arqueológico más importante de los últimos años y revoluciona el mapa de la Roma antigua.
La planta de la casa era rectangular, con dos ambientes, un ingreso y probablemente un pórtico, con muros de madera revestidos de yeso de arcilla y cubiertos por un techo con tejas. Las dimensiones de la casa eran de diez metros por tres y medio, con una altura de casi tres metros. El descubrimiento es de gran importancia porque demuestra que hace 2.600 años la antigua Roma era mucho más grande de lo que hasta ahora se creía, según ha manifestado la arqueóloga Mirella Serlorenzi, directora de las excavaciones.
«Este hallazgo excepcional nos obliga a rehacer nuestros conocimientos sobre el desarrollo de Roma en el siglo VI», explica Francesco Prosperetti, superitendente del Área Arqueológica de Roma. Las excavaciones se encuentran en el palacio Canevari, un antiguo Instituto Geológico. El extraordinario estado de conservación de la casa se debe a una serie de circunstancias histórico-urbanísticas: el área pertenecía, hasta el año 1873, al convento de los Carmelitas.
Después fue expropiado, «por utilidad pública», y el edificio se transformó en el Instituto Geológico, permaneciendo intacta la zona arqueológica. Es algo insólito en este área del Quirinal, una de las siete colinas de Roma, porque después de la unidad de Italia, en 1861, se realizó una desmesurada urbanización que hizo desaparecer muchos hallazgos arcaicos.
Actualmente, en el edificio del ex Instituto Geológico se realizaban obras de reestructuración para dedicarlo a oficinas. Pero las excavaciones formarán parte de una especie de museo compatible con la utilización del edificio para oficinas. A pocos metros de la casa arcaica, y conectado con ella, fue descubierto en el 2013 un inmenso templo, con 40 metros de largo y 25 de ancho, del siglo V a.C. Por su posición elevada, todo hace pensar que la casa era habitaba por una familia rica y de alto rango social, seguramente ligada al cuidado del área sagrada, probablemente el custodio.
El valor del extraordinario descubrimiento de esta casa «aristocrática» se ve acrecentado por el hallazgo de una especie de choza con un «suggrundarium», una tumba infantil, porque el niño era sepultado cerca de su familia. Eran los años del sexto rey de Roma, Servio Tullio, etrusco, hijo de una prisionera de guerra, que reinó desde el 578 a.C. al 539 a.C., durante 44 años.
Este descubrimiento confirma que la Roma de esa época monárquica tenía una estructura urbana y social mucho más compleja y amplia de lo que hasta ahora se había imaginado. La leyenda dice que Roma fue fundada por Rómulo y Remo el 21 de abril del 753 a.C. La primera República se declaró en el 509 a C., comenzando un largo periodo de enormes transformaciones en Roma.