Cuando ISIS invadió Mosul en 2014, los cristianos recibieron un ultimátum: convertirse al Islam, pagar un impuesto o el exilio.
El padre Steven Azabo, cuya parroquia y ciudad natal en la diócesis de Alqosh fueron destruidas, recuerda la difícil decisión de muchos cristianos de dejarlo todo atrás en lugar de renunciar a su fe.
STEVEN AZABO
"Nos convertimos en extranjeros, refugiados, en nuestro propio país, sin casas, sin iglesias, sin nada. Eso es lo que hicimos, y nos alegró elegir lo más esencial para nuestras vidas. Elegimos a Dios sobre todas las cosas".
En una tierra plagada de guerra, persecución y muerte, la visita de Francisco, prevista para marzo de 2021, es un faro de esperanza para la coexistencia entre cristianos y musulmanes. El padre Steven dice que el Papa tiene la intención de visitar la Catedral de Nuestra Señora del Perpetuo Socorro, escenario de la trágica matanza de cristianos en medio de la Misa en 2010.
STEVEN AZABO
"Mataron a todo el mundo: mujeres, niños, incluso dos sacerdotes, buenos amigos míos. Habíamos estado juntos en Bagdad. Creo que el Papa quiere visitar este lugar. Espero que cuando rece allí, nos unamos en oración con nuestro Papa, porque nuestra tierra es una tierra llena de mártires".
Francisco ha seguido la situación con atención durante años y su deseo de visitar Irak no es nuevo.
STEVEN AZABO
"Siempre ha seguido las noticias, ha sido informado, ha visto algunas fotos, pero esta vez, será diferente porque estará entre nosotros. Será capaz de oír y ver por sí mismo. Podrá hablar con el pueblo cristiano de Irak. Tendrá una mejor comprensión de lo que significa la persecución cristiana en el corazón de Medio Oriente".
Después de años como exiliados en su propio país, el padre Steven dice que los cristianos iraquíes se preparan con entusiasmo para recibir al Papa, esta vez no desde fuera de Irak, sino desde dentro de las fronteras de su propio hogar.
Traducción: Daniel Díaz Vizzi